El aceite virgen extra de La Ballestera conquista los paladares más exigentes en cuatro continentes.
En lo alto de las sierras que acarician el cielo entre Cazorla y Andújar, donde el silencio es un lenguaje y la tierra respira arte, nace un aceite que no se parece a ningún otro. Este 2025, el virgen extra de cosecha temprana de La Ballestera ha sido reconocido con las más altas distinciones en cuatro de las capitales internacionales del sabor: Atenas, Nueva York, Italia y China.
Un año dorado. Cuatro medallas que no solo celebran la excelencia, sino que confirman algo más profundo: que en cada gota de este aceite vive una armonía rara entre territorio, paciencia y belleza.

Doble oro en Atenas
En el corazón del Mediterráneo, cuna del olivo, el jurado del Athena International Olive Oil Competition ha otorgado el Doble Oro a La Ballestera. Un reconocimiento reservado a los aceites excepcionales, donde la intensidad y la finura conviven en equilibrio perfecto.
Oro en Nueva York
En la ciudad que nunca duerme, donde lo auténtico brilla entre el ruido, La Ballestera ha sido galardonada con una Medalla de Oro en el NYIOOC World Olive Oil Competition. Un tributo desde una de las plataformas más influyentes para los aceites premium a nivel mundial.


Oro en Italia
Desde el país que ha elevado el aceite a arte cotidiano, llega otra Medalla de Oro. En el prestigioso certamen italiano, el virgen extra de La Ballestera ha sido celebrado por su pureza, frescura y complejidad aromática.
Oro intenso en China
En el mercado asiático, cada vez más sofisticado y atento a los matices del aceite de oliva, La Ballestera ha sido distinguida con el galardón “Intense Gold” en el Oil China Competition. Un reconocimiento que subraya su perfil potente, su estructura elegante y su autenticidad sin concesiones.

Más que un producto, una filosofía
Sin visitas, sin ruidos, sin turismo. La Ballestera no busca la masificación, sino el encuentro íntimo con quienes entienden que lo valioso no necesita espectáculo. Sus olivos, cultivados con mimo en una finca de doscientas hectáreas, producen un aceite de edición muy limitada que solo unos pocos llegan a probar.
En cada botella: un paisaje.
En cada aroma: una estación.
En cada trago: una historia de luz, arte y tierra.
La Ballestera. Oro en esencia.